Lio en la clase de ciencias

7 julio 2009

Lío en la clase de ciencias por Pedro Pablo Sacristan
El profesor de ciencias, Don Estudiete, había pedido a sus alumnos que estudiaran algún animal, hicieran una pequeña redacción, y contaran sus conclusiones al resto de la clase. Unos hablaron de los perros, otros de los caballos o los peces, pero el descubrimiento más interesante fue el de la pequeña Sofía:
– He descubierto que las moscas son unas gruñonas histéricas – dijo segurísima
Todos sonrieron, esperando que continuara. Entonces Sofía siguió contando:
– Estuve observado una mosca en mi casa durante dos horas. Cuando volaba tranquilamente, todo iba bien, pero en cuanto encontraba algún cristal, la mosca empezaba a zumbar. Siempre había creído que ese ruido lo hacían con las alas, pero no. Con los prismáticos de mi papá miré de cerca y vi que lo que hacía era gruñir y protestar: se ponía tan histérica, que era incapaz de cruzar una ventana, y se daba de golpes una y otra vez; pom!, pom!, pom!. Si sólo hubiera mirado a la mariposa que pasaba a su lado, habría visto que había un hueco en la ventana… la mariposa incluso trató de hablarle y ayudarle, pero nada, allí seguía protestando y gruñendo.
Don Estudiete les explicó divertido que aquella forma de actuar no tenía tanto que ver con los enojos ni las protestas, sino que era un ejemplo de los distintos niveles de inteligencia y reflexión que tenían los animales, y acordaron llevar al día siguiente una lista con los animales ordenados por su nivel de inteligencia…
Y así fue como se armó el gran lío de la clase de ciencias, cuando un montón de papás protestaron porque sus hijos..Los habían puesto a ellos ¡sus propios padres ¡ entre los menos inteligentes de los animales!! Según los niños, porque no hacían más que protestar, y no escuchaban a nadie.
Y aunque Don Estudiete tuvo que hacer muchas aclaraciones y calmar unos cuantos padres, aquello sirvió para que algunos se dieran cuenta de que por muy listos que fueran, muchas veces se comportaban de forma bastante poco inteligente, que debian callarse un poco a veces y escuchar más a sus hijos.

Reflexión: Aunque este sea un cuento infantil, les pido se sienten un segundo a reflexionar que capacidad de escuchar tenemos, y si nos quejamos mucho porque otros no nos escuchan, reflexionar tambien que debemos modificar dentro de nosotros para lograr ese vinculo tan especial.
Aunque hay quienes lo llaman don, en realidad el escuchar no es un don. Un don es algo que traes contigo. Pero el saber escuchar es mas que un buen habito, algo que puedes formar.

El saber escuchar es importante para tener una buena comunicación y conexión con las personas, sobre todo con los amigos, el trabajo, pareja e hijos. Para escuchar hay que estar interesado en hacerlo, hay que tener interés en la otra persona. Al no escuchar estas denotando falta de interés.

A todos nos gusta ser escuchados, si deseas gustarle a la gente comienza por escuchar.
¿Porque no estas escuchando? ¿Porque se te hace difícil escuchar? Es acaso que no te interesa nadie mas que tu misma, es que no puedes concentrarte, es que estas siempre de carreras.

Identifica las razones y tratar de cambiar, las personas captan cuando no las queremos escuchar, miran la falta de interés y se sienten mal. Porque maltratar a un ser amado o aun a algún extraño. El no escuchar es casi como ignorar.
Si aprendes a escuchar las demás personas te percibirán como una personal cálida y amistosa y desearan tu compañía. Al escuchar aprendes y creces como ser humano. Además a ti también te gustan que te escuchen, si tu escuchas otras personas querrán escucharte.
Con amor
Sarita